El pasado 30 de octubre cuando la DANA desoló la Comunidad Valenciana, Ana Rosa Quintana hizo una promesa a varios de los vecinos afectados: volvería antes de que terminase el año porque no se podía olvidar lo que había pasado y lo que sigue pasando. Casi dos meses después, la presentadora de TardeAR ha cumplido su promesa Leer El pasado 30 de octubre cuando la DANA desoló la Comunidad Valenciana, Ana Rosa Quintana hizo una promesa a varios de los vecinos afectados: volvería antes de que terminase el año porque no se podía olvidar lo que había pasado y lo que sigue pasando. Casi dos meses después, la presentadora de TardeAR ha cumplido su promesa Leer
El 29 de octubre, cuando la catastrófica DANA, asoló varias localidades valencianas y manchegas, cientos de periodistas, cámaras, programas de televisión se volcaron en masa para estar allí y dar testimonio de la tragedia. Muchos fueron los rostros conocidos que quisieron estar allí para contar de primera mano la realidad. Hoy, cuando han pasado más de dos meses, sigue habiendo prensa pero el interés, como siempre ocurre en estas desgracias, ha ido decayendo. Sin embargo, hay quien de esos rostros conocidos hizo una promesa a los vecinos que le relataron su sufrimiento. Una de ellas fue Ana Rosa Quintana, la presentadora de TardeAR prometió que antes de que acabara el año volvería allí para escucharles, para darles voz y para que no cayera en el olvido.
Ana Rosa Quintana no podía incumplir su promesa, como tampoco lo ha hecho Carlos Alsina que, pese a ser el último en marcharse de los lugares asolados por la DANA también vuelve en Nochebuena, o Carlos Herrera de la Cope, con el que la presentadora coincidirá en Valencia. Porque sólo estando allí y contando lo que allí sucede a nadie se le podrá olvidar que todavía queda mucho por hacer y que nada ha pasado todavía.
Esta mañana, Ana Rosa Quintana y su equipo, junto a varios directivos de su productora, Unicorn Content, han cogido el coche y se han puesto rumbo a los pueblos de la zona de L’Horta Sud para conocer de primera mano cómo está la situación, las ayudas que han llegado y las necesidades que todavía tienen los ciudadanos afectados.
Aunque Ana Rosa Quintana dedicará esta tarde un especial sobre la DANA en TardeAR, con Beatriz Archidona y Manu Marlasca en plató, EL MUNDO ha podido comprobar cómo ha sido el regreso a la zona cero de la presentadora. Allí, Ana Rosa Quintana se ha encontrado con los problemas que siguen sufriendo los afectados, pero también con el cariño de muchos vecinos que agradecen que los medios no se hayan olvidado de ellos.
Ana Rosa Quintana ha pasado la mañana recorriendo los barrios más afectados, charlando con los vecinos, atendiendo sus súplicas, pero sobre todo, escuchándoles. Consciente de que el interés mediático de la DANA ya no es el que era, Ana Rosa Quintana ha regresado a la Comunidad Valenciana no sólo para cumplir su promesa, sino también para acompañar a familias y personas que lo perdieron todo hace dos meses y que con la llegada de la Navidad lo peor regresa a sus memorias.
Las poblaciones afectadas están luchando no sólo contra todo lo que perdieron sino también contra ese olvido. Este miércoles, de hecho, varias rotondas de poblaciones afectadas por la fatídica riada amanecieron con un gran mensaje navideño para intentar «alegrar las calles» a pesar de tanto desastre. También este miércoles se terminó la limpieza de los 542 garajes destrozados por la DANA. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer.
La terrible DANA sesgó 223 vidas e innumerables pérdidas materiales. El municipio con más fallecidos fue Paiporta, con 45, seguido de Catarroja, con 25. En las pedanías de Valencia ubicadas al otro lado del nuevo cauce del río Turia se registraron 17 fallecidos. 37.000 tuvieron que ser rescatadas.
El agua se desbordó con violencia y se llevó por delante todo lo que encontró a su paso: casas, coches, carreteras, vías del AVE, Cercanías y metro y empresas, dejando incomunicada una zona que concentra al 30 % de la población de la provincia antes de desembocar en L’Albufera con toneladas de residuos arrastrados.
En el ámbito económico, la Cámara de Comercio de Valencia ha calculado en 13.300 millones de euros los daños directos, con 129.000 vehículos destrozados, 69.000 viviendas dañadas y 57 polígonos industriales afectados. En los municipios inundados hay más de 63.000 empresas y solo los 15 municipios de la ‘zona cero’ representan el 8% del PIB y del empleo de la provincia de Valencia, donde ya son más de 30.200 los trabajadores en situación de expediente temporal de empleo por fuerza mayor.
La Generalitat ha reclamado 31.402 millones de euros para la recuperación al Gobierno de España -que ha movilizado ya 16.600- y cifra en 1.050 millones de euros los que lleva destinados a la reparación de infraestructuras, la retirada de 350.000 toneladas de residuos o las ayudas directas.
Profunda es también la cicatriz que las riadas dejan en el ámbito político, donde la catástrofe ha cambiado el paso de la legislatura valenciana apenas dieciséis meses después de empezada para enfocarlo todo a una reconstrucción que quiere dirigir el president de la Generalitat, el popular Carlos Mazón, a quien las últimas encuestas electoral pasan factura por su gestión de este episodio.
El presidente, a quien dos manifestaciones masivas han reclamado que dimita por su tardanza en actuar el martes negro, cuando estuvo comiendo varias horas con una periodista, ha creado una vicepresidencia para la recuperación, a cuyo frente ha puesto a un militar retirado, y una Conselleria de Emergencias tras destituir a la consellera que dirigió esta emergencia y a la que demostró falta de empatía con los familiares de las víctimas.
Mazón, quien ha culpado a la AEMET y la Confederación Hidrográfica del Júcar de no haber aportado la información necesaria y que ha afirmado que el día de la dana falló el sistema, se ha comprometido a no optar a la reelección si no es capaz de liderar la reconstrucción, pero tanto el PSPV-PSOE como Compromís reclaman que el PP le aparte ya y cuestionan los contratos de emergencia que se están adjudicando.
Desde el Gobierno de España, el presidente, Pedro Sánchez, ha considerado que quien falló fue Mazón, al que ha acusado de no entender su responsabilidad, mientras que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha sostenido que Sánchez no ejerció sus competencias y debería haber declarado la emergencia nacional.
En todo caso, las responsabilidades políticas se intentarán depurar en las comisiones de investigación que ya se han aprobado o anunciado, mientras que las judiciales se dirimirán en los tribunales, ante los que se han presentado ya varias denuncias y SOS Desaparecidos prepara una demanda penal contra Ayuntamientos, Consell y Gobierno.
Televisión // elmundo