La jefa del 112 admite a la jueza de la dana que el Gobierno central le pidió a las 18.35 el envío de la alerta

Inmaculada Piles, jefa de servicio de la centralita telefónica de emergencias 112, ha revelado a la jueza de Catarroja (Valencia) que investiga la dana, Nuria Ruiz Tobarra, que un miembro de la delegación de Gobierno en la Comunidad Valenciana le pidió a las 18.35 horas del día de la tragedia que enviara un Es Alert, la alerta masiva a móviles para informar a la población de la magnitud de la desgracia. La Generalitat no remitió esta notificación hasta las 20.11, cuando la mayor parte de los desparecidos había muerto. Así lo ha explicado Piles, una alta funcionaria de la Generalitat, este martes en su declaración como testigo ante la magistrada, según relatan a EL PAÍS fuentes presentes en su comparecencia.

La responsable ha indicado también que Presidencia de la Generalitat le preguntó a las 12.05 del día de la catástrofe sobre cómo ir a las zonas afectadas por la riada que en 2024 dejó 229 muertos en la provincia de Valencia.

En su exposición, la jefa del 112 ha relatado que uno de los dos exaltos cargos del Ejecutivo de Carlos Mazón imputados en la causa, el exdirector general de Emergencias, Emilio Argüeso, le envió un WhastApp a esa hora en el que le preguntaba que Presidencia de la Generalitat estaba interesada en conocer cuál era la mejor ruta para ir a Xàtiva (Valencia, 30.378 habitantes), que requiere pasar por áreas cruzadas por el barranco del Poyo, génesis de la inundación. “Para llegar a Xàtiva desde Valencia, ¿cómo se va?, que no esté cortado. Es para Presidencia” (sic), inquirió Argüeso a Piles.

La pregunta del alto cargo de la Generalitat revela que el gabinete de Mazón conocía a media mañana del 29-O la dimensión de la tragedia. Pese a estar informado, el president mantuvo su agenda institucional. A partir de las 12.30, tras decretarse las alertas hidrológicas por el río Magro y el barranco del Poyo, el jefe del Consell asistió a la presentación de la estrategia autonómica de salud digital y, después (a las 13.45) aterrizó en una reunión con dirigentes sindicales y empresariales en la sede de su Ejecutivo, en el corazón de la ciudad, para abordar los Presupuestos autonómicos. A partir de las 15.00, Mazón puso rumbo al céntrico restaurante El Ventorro para almorzar con la periodista Maribel Vilaplana. La comida se prolongó casi cuatro horas (hasta las 18.45 horas).

La testigo, licenciada en Físicas y el alto cargo de Emergencias de mayor rango que ha declarado en el juzgado, ha reconocido que ella decretó las alertas hidrológicas del río Magro y el barranco del Poyo. Al comparecer como testigo, Piles tiene la obligación de decir la verdad y contestar a todas las partes.

Como reveló EL PAÍS, Mazón mantuvo intacta su agenda institucional el día de la dana, pese a conocer desde las 9.00 de la mañana la magnitud de la situación y encargar un informe a su equipo a primera hora sobre el riesgo. Durante el pleno del Consell, que se celebró entre las 9.00 y las 11.00 horas del día de la desgracia se abordó el alcance de la tromba después de que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) decretara la alerta roja, la máxima en la escala, a las 7.36 horas.