Sin presencia de presentadores, el spot de Navidad de Mediaset España cuenta con voluntarios reales que participaron en el rodaje de una emotiva historia con la que se simboliza la solidaridad, la unión y la rebeldía ante la adversidad de toda una sociedad Leer Sin presencia de presentadores, el spot de Navidad de Mediaset España cuenta con voluntarios reales que participaron en el rodaje de una emotiva historia con la que se simboliza la solidaridad, la unión y la rebeldía ante la adversidad de toda una sociedad Leer
Un árbol de Navidad que se quema, una niña que se entristece, una madre desesperada, un joven rebelde, un pueblo que crece ante la adversidad… Elementos y situaciones que todos conocemos, que incluso pueden ser el día a día de cualquiera. Ahora, cambiemos todos ellos por una tragedia que asola decenas de localidades, por miles de niños que pierden sus escuelas por culpa de una horrible DANA, por la tristeza y la desolación de quien lo ha perdido todo, y sumémosle los millones de voluntarios que fueron y siguen ayudando, por todo un pueblo unido para hacer frente al peor de los desastre. Lo peor, la tragedia, las pérdidas…; lo mejor, lo que ha demostrado la sociedad española, su solidaridad.
Y esto es lo que Mediaset España ha querido visibilizar en su anuncio de Navidad, estrenado esta noche: sin presencia de presentadores, la pieza cuenta con voluntarios reales que participaron en el rodaje de una emotiva historia con la que se simboliza la solidaridad, la unión y la rebeldía ante la adversidad de toda una sociedad.
El grupo audiovisual se ha olvidad de las estrellas de la televisión y ha puesto el foco y todo el protagonismo de su campaña navideña de 2024 a los que sin duda han sido los héroes del año: los voluntarios que han acudido a Valencia para ayudar a los afectados por la DANA.
Para ello, el grupo ha contado entre los intérpretes de su spot de Navidad con voluntarios reales, que junto a los actores protagonizan una preciosa historia de luz y esperanza en la que la unión de la gente y de toda la sociedad es capaz de superar cualquier adversidad.
Efectivamente, el spot comienza con el árbol de Navidad de un pueblo que se quema por completo tras un cortocircuito. Las llamas han acabado con cada rama, con cada brizna, con cada bola y espumillón… y con las ilusiones y esperanzas de todos.
La tristeza se apodera de todos los vecinos que a la mañana siguiente se encuentran con un árbol carbonizado en medio de la plaza de su localidad. Una niña lo observa triste, una madre vuelve de la compra y piensa. Llega a casa, su hijo está mirando el móvil. Ella no dice nada.
Éste no se ha enterado del incendio; o si lo ha hecho y ni se ha conmovido, que cada espectador saque su propia conclusión. Su madre lo observa y amaga con hacerle partícipe, pero se va sin hacerlo, resignada y consciente de que su atención está secuestrada por unas redes de las que le resulta imposible escapar. Como siempre. Él alza la vista, pero calla.
Mirando por la ventana, el joven observa el árbol calcinado con cierta apatía. La gente deambula por la plaza y lo mira, con el ánimo tan ceniciento como su maltrecho esqueleto. Una pena, la verdad. Pero, ¿qué puede hacer él? ¿Qué puede hacer nadie? Las cosas pasan y punto. Aunque… ¿hay que aceptarlas como vienen? ¿Es el destino tan implacable que no se le puede plantar cara? Quizá sí… o quizá no. En el anuncio de Mediaset España la respuesta es no.
Armado con cables y alargadores, el joven sale a la calle como guerrero que va a la batalla. Con decisión y coraje comienza a tirarlos alrededor del árbol y enrosca una primera bombilla. Otros jóvenes le observan y en sus ojos empieza a brillar la esperanza. Contagiados por su energía e inspirados por su determinación, estos y otros vecinos se unen a la tarea.
Cada uno aporta lo que puede a la improvisada restauración del árbol: el faro de una moto, el neón de un negocio, un flexo, un globo terráqueo, una vieja lámpara de salón. Aupada por su padre, una niña cuelga sus zapatillas luminosas; una joven deja encendido el móvil, su bien más preciado. Todo el pueblo trabaja unido y emocionado.
Al caer la noche, todos se reúnen entusiasmados para contemplar el encendido. El árbol vuelve a brillar, pero aún brillan más los corazones de los allí presentes. Y las miradas, como la que cruzan el joven que ha hecho posible la magia y su madre orgullosa. Y lo han hecho juntos.
Y es que el claim de esta campaña es precisamente esa palabra tan común, tan escuchada, pero que tanto significado tiene: ‘Juntos’. Con un estilo narrativo basado en el realismo mágico, la historia del spot, que se ha rodado íntegramente en la localidad madrileña de Torrelaguna, transmite verdad y autenticidad al tiempo que imprime emoción y fantasía a una hermosa metáfora que pone el foco en valores como la unión, la solidaridad, el coraje y el trabajo en equipo.
La idea de este spot, que se sale de las campañas habituales de Mediaset España para estas fechas, surge de planteamiento de la división de Comunicación y RR.EE. y la dirección de Antena de Mediaset España. Para llevarla a cabo el grupo audiovisual ha contado la agencia LLYC y con los directores Rafa Antón y Julio Alonso Caballero.
LLYC, que recibió el encargo tras un concurso en el que participaron otras tres agencias, es la firma global líder de Marketing y Corporate Affairs en Iberia y Latinoamérica. Ha sido elegida Mejor Agencia Creativa de Comunicación Global en 2022, Consultora del año en América Latina en 2023 y Mejor Agencia Independiente en diferentes festivales y rankings creativos en 2024.
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