Cerdán asegura a su entorno que su error fue conocer la trama corrupta pero no denunciarla

Santos Cerdán niega toda verosimilitud al alud de indicios que la Unidad Central Operativa (UCO) ha recopilado sobre el papel protagonista que el ex secretario de Organización del PSOE habría desempeñado en una trama de mordidas a cambio de adjudicaciones de contratos públicos junto a José Luis Ábalos, su antecesor como número tres en la cúpula socialista entre junio de 2017 y julio de 2021, y Koldo García, a quien abrió las puertas de Ferraz como chófer de Ábalos en una decisión clave para los investigadores de la unidad anticorrupción de elite de la Guardia Civil.

Cerdán ha transmitido a su entorno, según ha podido saber EL PAÍS, que su único error fue conocer la red corrupta y no haberla denunciado. Pero no admite ninguna culpabilidad en nada más, según esas fuentes. El 25 de junio Cerdán declara de forma voluntaria en el Tribunal Supremo, dos días después que Ábalos y García. El abogado de Cerdán será Benet Salellas, el exdiputado de la CUP, que fue abogado de Jordi Cuixart durante el juicio contra los líderes del procés. La decisión llega después de que el abogado del PSOE le anunciara que dejaría su defensa por incompatibilidad,

La línea de defensa de Cerdán se basa en el rechazo a su involucración con una estructura que atribuye al exministro de Fomento y a Koldo García, al que abrió las puertas de Ferraz tras la reelección de Pedro Sánchez como secretario general, hasta su salto un año más tarde al Gobierno de la mano de Ábalos. El político navarro fue la mano derecha de su predecesor en la sala de máquinas de Ferraz y se encargó en la práctica del día a día del PSOE en los años que Ábalos compaginó el partido con uno de los ministerios que mueven más millones de dinero, hasta que en el verano de 2021 asumió el control orgánico tras el cese de Ábalos. Un poder que apuró hasta la semana pasada con el beneplácito de Sánchez —en la última sesión de control al Gobierno subrayó que aún no hay sentencia firme—, que confió en él hasta que estuvo en sus manos el informe de la UCO. Cerdán mantiene desde entonces su inocencia pese a las pruebas en su contra.

En las explicaciones que ha dado a su entorno, Cerdán dice que ha estado en contacto con técnicos que le han dicho que las grabaciones requisadas a Koldo García están incompletas. También ha asegurado, según las fuentes consultadas, que el audio en el Cerdán insta a García a callarse —“¡Koldo! Que no quiero que hables de esto, que no se habla»— en lo que parece un reparto de mordidas de dinero público no estaría bien contextualizado. Según Cerdán, venía precedido de un intento de extorsión o chantaje por parte de Koldo dirigido contra el presidente del Gobierno.

El exdirigente socialista argumenta que su error es haber tenido conocimiento de que existía esa trama de cobro de comisiones ilegales en amaño de obras públicas y no haberlo denunciado. Pero, según esa versión, ni participó ni organizó en la trama, por lo que no se habría lucrado de forma ilícita. Cerdán renunció el lunes como militante del PSOE y a su escaño en el Congreso. El partido expulsó ese mismo día a Ábalos tras 16 meses estudiando su expediente.

La UCO sitúa en Navarra el origen de la red corrupta. La empresa Servinabar 2000 SLU, creada en 2015 y de la que Cerdán niega ser socio pese a los datos aportados por la UCO, obtuvo junto a otras empresas con las que se unió temporalmente al menos seis contratos millonarios según los investigadores. En total, las adjudicaciones se acercan a los 89 millones de euros. Cerdán tenía además casi la mitad de una empresa clave para la trama, según una escritura de 2016 hallada por sus agentes. El documento se encontró en el domicilio del empresario navarro Joseba Antxon Alonso, que habría transferido a Cerdán 1.350 participaciones (el 45%) de las 3.000 que constituyen la sociedad. Cerdán lo niega e insiste en que todo es falso, aunque no ha entrado en detalles.

La UCO remitió este miércoles al magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente, que investiga la presunta trama que anidó en el Ministerio de Transportes en la etapa de Ábalos, un oficio en el que le pidió autorización para investigar el patrimonio de Cerdán, como ya hizo anteriormente con el exministro. La petición del instituto armado, que se produce después de que Cerdán haya dejado de ser aforado tras su renuncia como diputado, detalla cinco cuentas bancarias en tres entidades financieras a nombre del hasta hace unos días número tres del PSOE y familiares suyos (excluye expresamente los depósitos a nombre del PSOE y la Fundación Pablo Iglesias en las que el exsecretario de Organización pudiera aparecer como autorizado), de las que pide todos los productos financieros, posibles cajas de seguridad, cobros de cheques y transferencias emitidas o recibidas superiores a 300 euros entre 2014 y 2024. También pide a los bancos que si hubieran remitido al Sepblac (Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias) “información sospechosas de blanqueo de capitales”, que les faciliten la documentación que hubiera sustentado aquellas. Por último, pide a la Agencia Tributaria toda la información fiscal sobre Santos Cerdán referida al mismo periodo.